He estado pensando en los aprendizajes que me han venido dejando estos días de cuarentena en casa producto del Coronavirus y hoy se los quiero compartir. Es algo personal y probablemente ustedes estén reflexionando sobre otras cosas diferentes.
Lo primero que me vino a la mente en estos días en casa es lo acelerado que vivimos todo el tiempo, donde te puedes sentir juzgado por otras personas o por ti mismo si te permites hacer una pausa. Hoy en día con lo dinámico de las redes sociales, los trabajos, las exigencias del “éxito” como es percibido socialmente, podemos caer en plantearnos millones de metas, estándares de perfección que lo que pueden traernos es cansancio, frustración y esa sensación de tener que hacer siempre algo para alcanzar estos estándares.
Sin embargo, estos días en casa, donde aunque algunos estemos trabajando en horario de oficina, hemos tenido que bajar el ritmo, sin correr en las mañanas para estar listos, estar casi una hora en el carro para ir y venir, ajustar los horarios para alcanzar todas las cosas que hay que hacer, lo que me ha hecho pensar que tener una pausa en nuestras vidas es válido y es necesario.
Este tiempo nos ha permitido conectar con las cosas que nos gustan, en mi caso con colorear, con las plantas, disfrutar cosas sencillas como unas flores, escribir, leer, hacer una receta diferente con tranquilidad, tomar una siesta porque me provocó sin pensar que podría estar haciendo algo más productivo con ese tiempo, etc.
Lo otro que vengo entendiendo en estos tiempos aunque ya lo había leído antes, es que el estrés no es un estado que forma parte de nosotros y pareciera que en los últimos tiempos así lo hemos asumido. Muchas personas ni siquiera saben identificar cuando están estresadas o como combatir el estrés, cosa que cada quien tiene que identificar porque como se manifiesta el estrés en mi no necesariamente es como se manifiesta en otra persona y las herramientas para enfrentarlo también varían en cada individuo.
Pero trabajando desde casa, con toda la información que tenemos disponible, necesariamente hemos tenido que optar por buscar maneras para drenar el estrés y no hacernos los locos con el tema. En mi caso, he intentado Yoga en casa, caminatas alrededor del edificio, escuchar música, colorear mandalas, cuidados adicionales de las plantas, limpiar y hasta ahora ha funcionado.
Definitivamente nos tocará seguir implementando estas rutinas cuando todo pase y volvamos a nuestras tareas diarias, pero bajo otro nivel de consciencia.
Lo siguiente que he pensado en estos días, es que nosotros mismos decidimos que noticias y cuantas noticias consumimos, y eso definitivamente tiene un impacto en nuestro estado de ánimo y manejo del estrés. En mi caso decidí enterarme de las medidas de prevención para evitar el contagio del virus, sin enterarme de cifras, decesos, etc. Así como tengo días sin leer muchas noticias relacionadas a la situación de mi país. Me ha ayudado? Por su puesto, porque además desde donde estoy más allá de preocuparme no hay mucho que pueda hacer para cambiar la situación de otros lugares del mundo y mi intención por estos días es buscar las maneras de mantener mi salud emocional.
Esto pareciera que se va a extender y nos va a ayudar a ver más adentro, a conectar con las cosas que nos funcionan, que realmente necesitamos, a poner más límites o tomar decisiones que nos ayuden a trascender como individuos, a ser más empáticos y compasivos.
Espero que estén a salvo, seguimos leyéndonos
Un abrazo
Gracias por el post. Es algo que se diferente forma nos está pasando a todos
Me gustaMe gusta
Hola Vero, así es y a medida que van avanzando los días seguro tendremos otros aprendizajes
Me gustaLe gusta a 1 persona